TMB Transports Metropolitans de Barcelona anunció la pasada semana la apertura del concurso público de vigilancia del suburbano, que lleva un presupuesto de 143,6 millones de euros para cuatro años más la prórroga.
Este concurso está dividido en ocho lotes, incluyendo uno dedicado al Centro de Control y otro a las unidades caninas, así como las llamadas MAVs o unidades móviles.
Se trata de un concurso similar a la adjudicación de noviembre 2020, que se la repartieron Prosegur Vigilancia (líneas 1, 2, 3, 9 y 10) y Securitas (líneas 4-5-11 Centro Control y Móviles) y del que quedaron fuera a Eulen y a Ombuds (esta última quebró con un agujero de 231,7 millones de euros).
Tras estos cuatro años de servicio, los sindicatos acusan a ambas empresas de “mercantilistas” por presentarse solo a concursos con márgenes –de posibles beneficios- elevados, y a ambas empresas y a la administración de “poner en peligro la seguridad” “porque los pliegos de contratación no contemplan “aumentos de personal importante“.